domingo, 26 de agosto de 2012

Christian Schad y shadografía

La "shadografía" es una técnica fotográfica creada por el pintor alemán Christian Schad (1894-1982)  que en el año 1918 ensayó, durante su estancia en Suiza, pruebas de fotografía sin cámara (como después harían Man Ray o Moholy-Nagy) dentro de los denominados fotoexperimentos dadaístas.

Estas composiciones fototécnicas fueron hechas a base de la colocación directa del objeto, sin cámara sobre un papel sensible a la luz . El resultado tiene características oníricas, borrosos contornos narcotizantes, dado que se obtiene un collage a través del reflejo de los objetos, una impresión de los materiales ordenados composicionalmente, bocanada opiácea en aquella nostálgica y efervescente época de creatividad en tiempos convulsos.

Conocido en el ambiente de las vanguardias europeas su obra se asoció al movimiento de la Nueva objetividad y fue conocida por su particular representación de la cultura de los cafés durante la República de Weimar. A continuación seis de sus obras

Schadografías (un término acuñado por el poeta de vanguardia Tristán Tzara) que consistía en poner varios elementos, habitualmente trozos de papel y objetos de desecho, sobre placas fotosensibles con un cristal encima de todo esto antes de exponerlo a la luz

Gjon Mili







Frank Gilbreth y Lillian Gilbreth,Pintar con luz

http://lightpaintingphotography.com/light-painting-history/

La pintura de luz (Light Painting) es una técnica fotográfica que consiste en la creación de la exposición por una fuente luminosa que se mueve dentro del marco. Mientras que la luz se puede utilizar para iluminar un objeto individual o existentes, se utiliza aquí para crear tu propio tema y “pintar” una imagen original. Se puede utilizar linternas, rayos láser , fósforos, velas, encendedores, etc.
Esta técnica se remonta a 1914, y las primeras imágenes que conocemos son su esposa, Frank Gilbreth y Lillian Gilbreth, que utiliza pequeñas luces y abriendo el obturador para seguir el movimiento de los trabajadores de producción en una oficina. Sin embargo, no la Gilbreth pareja creó esta serie con una finalidad artística, sino para desarrollar y aumentar la producción de los empleados y pueden simplificar su trabajo.
 

Francis Galton y “retratos compuestos”.

En los 80 comenzó a aplicar sus conocimientos científicos en el campo de la antropometría a los procesos de descripción y catalogación de colectivos, creando el sistema de identificación a través de las huellas de los dedos, y aplicando la técnica fotográfica que denominó “retratos compuestos”.
 Estos retratos “tipo” se basaban en grupos determinados con características similares como familias, enfermos, criminales, delincuentes, etc. En uno de sus libros principales “Inquiries into human faculty and its development”, publicado en 1883, expuso las bases teóricas y técnicas de estos retratos conseguidos mediante la superposición de diversas imágenes de rostros diferentes, que eran fotografiados en un mismo negativo. En estos retratos se respetaban una serie de elementos esenciales como la escala, la iluminación o el punto de vista para lograr una imagen uniforme y evitar que cualquiera de los retratos pudiera dominar sobre el resto. El resultado, en lugar del borrón confuso y sin perfiles que se podría imaginar, era una imagen sorprendente donde quedaban recogidos los rasgos genéricos y los trazos exclusivos de los distintos rostros de ese colectivo.


La propuesta de Galton fue seguida en Francia por Arthur Batut (1846-1918) que entusiasmado con los hallazgos del británico comenzó a fotografiar a diversos colectivos siguiendo su mismo sistema de superposición de retratos para crear lo que él llamó “retrato tipo”, cuyas características definió en un librito titulado “La photographie appliquée a la production du Type d´une famille, d´une tribu o d´une race” y que se editó en Paris en 1887.
Más que retratos en el sentido convencional de la palabra, las imágenes de Batut, como las de Galton, eran conceptos fotográficos del ser humano, construcciones ideadas y, por tanto, irreales, hipotéticas, artificiales: tal vez por eso, acabó llamando “retratos de lo invisible” a estas caras de figuras impersonales que no existen en lugar alguno.

La familia Kallikak

http://es.wikipedia.org/wiki/La_familia_Kallikak